Por Herbert W. Armstrong
¿Dónde se originó la costumbre de celebrar la Navidad? ¿Tiene su fundamento en la Biblia o en el
paganismo?
¡En este folleto se revelan algunas verdades
sorprendentes!
¿Conoce usted el origen
Era Noche Buena. Los niños habían hecho el pesebre y
esperaban ansiosos la venida de Papá Noel cargado de regalos. Al amanecer
¿Acaso dudaban los niños de lo que sus padres les decian? ¡Claro que no! Lo daban per hecho. ¿A usted no le sucedía lo mísmo?
Muy pocos se han detenido a pensar por qué creen lo que creen, por qué observan determinadas costumbres. La mayoría de nosotros aprendimos a aceptar todo sin vacilar.
¿Por qué sucede esto? ¿Por instinto ovejuno? No exactamente.
Por naturaleza tenemos la tendencia a hacer lo mismo que hacen los demás ... aunque estén equivocados. Las ovejas siguen el rebaño hasta el degolladero. Pero los humanos debemos fijarnos hacia dónde vamos.
¿Cuál fue el origen de la Navidad?
¿Es la Navidad realmente
la celebraci6n
Los apóstoles originales, quienes
conocieron a Jesús personalmente y fueron instruidos por El, ¿celebraban su
cumpleaños el 25 de diciembre? ¿La idea se les ocurrió alguna vez? Si Ia Navidad es la festividad más importante
¿Por qué es época de intercambiar regalos con nuestros parientes y amistades? ¿Tiene esta costumbre su origen en los magos quienes le presentaron obsequjos al niño Jesús? Las respuestas nos pueden sorprender.
La mayoria de las personas “suponen”
muchas cosas acerca de la Navidad... cosas que realmente no son ciertas. Pero
no supongamos nada, sino que busquemos los hechos.
Lo que dicen las enciclopedias
La palabra “navidad” es
una contracción de “natividad”, que significa natalicio. Esta fiesta hizo su
aparición en la Iglesia Católica y de allí se extendió al protestantismo y al resto
Ahora bien, ¿de dónde la recibió la
Iglesia Católica? No fue de las enseñanzas
Puesto que la celebración de la Navidad fue introducida en el mundo por la Iglesia Católica Romana y no tiene otra autoridad que la de ella misma, veamos lo que dice al respecto la Enciciopedia Católica (edición de 1911):
“La Navidad no estaba incluida entre las primeras festividades de la Iglesia ... los primeros indicios de ella provienen de Egipto ... Las costumbres paganas relacionadas con el principio de enero se centraron en la fiesta de la Navidad”.
En la misma enciclopedia, bajo “Día
Natal”, encontramos que Origenes, uno de los padres de la Iglesia, reconoció
la siguiente verdad: “...No vemos en las Escrituras que nadie haya guardado una
fiesta ni celebrado un gran banquete el día de su natalicio. Sólo los pecadores
[
La Encyclopedia
Britannica, edición de 1946, dice: “La Navidad no se contaba entre las antiguas festividades de la Iglesia…” No fue instituida por Jesucristo ni por los apóstoles, ni por autoridad bíblica. Fue tomada
más tarde
La Enciclopedia
Americana, edición de 1944, dice: “La Navidad. . .
de acuerdo con muchas autoridades no se celebró en los primeros siglos de in
Iglesia Cristiana, ya que la costumbre
Tomemos nota de este hecho importante. Estas autoridades históricas demuestran que durante los primeros dos o tres siglos de nuestra era, los cristianos no celebraban la Navidad. Esta fiesta fue introducida en la Iglesia Romana en el siglo cuarto de nuestra era ¡y no fue hasta el siglo quinto que se estableció corno fiesta oficialmente cristiana!
Jesús no nació un 25 de diciembre
¡Jesucristo ni siquiera nació en La época
“Era una antigua costumbre de los judíos de aquellos tiempos sacar sus rebaños a los campos y desiertos alrededor
de La Pascua (a principios de la primavera) y traerlos nuevamente a casa al comenzar las primeras lluvias” (Adam Clarke Commentary, Comentario de Adán Clarke, volumen 5, página 370).
El mismo comentarista declara: “Los
pastores vigilaban sus rebaños día y noche mientras permanecían fuera. Puesto
que la primera lluvia caía a principios
Cualquier enciclopedia u otra autoridad nos puede confirmar el hecho de que Cristo no nació un 25 de diciembre. La Enciclopedia Católica lo dice claramente.
La fecha exacta
Si Dios hubiera querido que guardáramos y celebráramos el cumpleañios de Jesucristo, no habría ocultado la fecha.
¿Cómo se introdujo en la Iglesia?
¿Cómo pudo esta fiesta pagana introducirse en el mundo cristiano occidental?
The
New Schaff-Herzog Encyclopedia of Religious Knowledge (La nueva
enciclopedia de conocimiento religioso, de Schaff-Herzog) lo explica claramente
en su artículo sobre la Navidad: “No puede determinarse con precisión... hasta
qué punto la fecha de esta festividad dependió de la pagana Brumalia (25 de
diciembre), que seguía a la Saturnalia (17-24 de diciembre) y conmemoraba el
día más corto del año y el nuevo Sol. Las festividades paganas de Saturnalia y
Brumalia estaban demasiado arraigadas en
las costumbres populares para ser suprimidas por la influencia cristiona ...
La festividad pagana, con su alboroto y jolgorio, gustaba tanto que los
cristianos vieron con agrado una excusa para continuar celebrándola sin mayores
cambios en el espiritu y la forma de su observancia. Predicadores cristianos de
Occidente y del Oriente Cercano protestaron contra la
frivolidad indecorosa con que se celebraba el nacimiento de Cristo, mientras
los cristianos de
Recuérdese que el mundo romano
había sido pagano. Antes
Tengamos en cuenta que esta gente había
sido educada en las costumbres paganas, siendo la principal aquella fiesta
idólatra
¡Así fue
El verdadero origen de la Navidad
Hemos visto, pues, que la Navidad llegó al
mundo por medjo de la Iglesia Católica y que ella la
recibió
La Navidad es una de
las principales tradiciones
Nimrod, nieto de Cam,
hijo de Noé, fué el verdadero fundador
De escritos antiguos
aprendemos que fué este hombre quien comenzó la gran
apostasía mundial organizada que ha dominado al mundo desde tiempos
inmemoriales hasta ahora. Nimrod era tan perverso que se dice se casó con su
propia madre cuyo nombre era Semíramis. Muerto prematuramente, su llamada
madre-esposa, Semíramis, propagó la perversa doctrina de la supervivencia de
Nimrod
Con tramas e intrigas Semíramis se
convirtió en la “reina
Así fue como en los siglos cuarto y
quinto, mientras los paganos del mundo rornano se convertían en masa al
“cristianismo” llevando consigo sus antiguas creencias y costumbres paganas y
disimulándolas bajo nombres cristianos, se popularizó también la idea de “la
madre y el hijo”, especialmente en época de Navidad. Las tarjetas de Navidad,
los villancicos y las escenas
Quienes fuimos criados en este mundo babilónico, quienes hemos escuchado y aceptado
estas cosas durante toda la vida, hemos aprendido a venerarlas
Nos asombramos al conocer la verdad y,
desgraciadamente, hay quienes se ofenden ante la verdad escueta. Pero Dios
ordena a sus ministros fieles: “Clama a voz en cuello, no te
detengas; ala tu voz
El verdadero origen
de la Navidad está en la antigua Babilonia. ¡Está envuelto en la apostasía
organizada que ha mantenido engañado al mundo desde hace muchos siglos! En
Egipto siempre se creyó que el hijo de Isis (nombre egipcio de Ia “reina
Jesús, el verdadero Mesías, no nació un 25 de diciembre. Los apóstoles y la Iglesia primitiva jamás celebraron el natalicio de Cristo en esa fecha ni en ninguna otra. No existe en la Biblia mandato ni instrucción niguna para hacerlo. Pero sí existe cl mandato de observar, no festejar, la fecha de su muerte (I Corintios 11:24-26; Juan 13:14-17).
Así fue
Otras costumbres paganas
Además de las tradicionales costumbres navideñas de muestros pueblos, hemos adoptado otras que con ser de origen pagano logran una acogida entusiasta. La “for de Navidad” y el madero que se enciende en la chimenea son “vestigios de épocas precristianas”, según la Enciclopedia Americana. La corona verde o guirnalda que adorna las puertas de tantos hogares es igualmente pagana. De ella dice Frederick J. Haskins en su libro Answers to Questions (Respuestas a algunas preguntas): “Se remonta a las costumbres paganas de adornar edificios y lugares de adoración para la festividad que se celebraba al mismo tiempo de La Navidad. El árbol de Navidad viene de Egipto y su origen es anterior a la era cristiana”.
Aun las velas, símbolo tradicional de la Navidad, son una vieja costumbre pagana, pues se encendían al ocaso para reanimar al dios Sol cuando éste se extinguía para darle paso a la noche.
También el Papá Noel
“Papá Noel”, o “Santa Claus”, es el mismo
“San Nicolás”, obispo católico dcl siglo quinto. La Encyclopedia Britannica, edición 11, volumen 19, páginas 648-649,
dice: “San Nicolás, obispo de Mira, santo venerado por los griegos y los
latinos el 6 de diciembre. . . Se dice que una leyenda
según la cual regalaba clandestinamente dotes a las tres hijas de un ciudadano pobre ... dio origen a la costumbre de
obsequiar regalos en secreto en vispera
Los padres castigan a sus niños por decir
mentiras, pero al llegar la Navidad ¡ellos mismos se encargan de contarles la
mentira de “Papá Noel”, los “Reycs Magos” o
Cierto niño, sintiéndose tristemente desilusionado al conocer la verdad, le comentó a un amiguito: “Sí, ¡y también me voy a informar acerca del tal Jesucristo!”
¿Es cristiano enseñarles a los niñios mitos y mentiras? Dios dice: “No engañareis ni mentiréis el uno al otro” (Levitico 19:11). Aunque a la mente humana le parezca bien y lo justifique, Dios también dice: “Hay camino que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte”.
Estudiados los hechos, pues, vemos con asombro que la costumbre de celebrar la Navidad en realidad no es costumbre cristiana sino pagana. ¡Ello constituye uno de los caminos de Babilonia en que el mundo ha caído!
¿Es bíblico el intercambio de regalos?
Nuevamente la verdad nos ha de sorprender. Primero, veamos el origen histórico de la costumbre de dar aguinaldos para después ver lo que nos dice la Biblia al respecto.
Citamos lo siguiente de la Bibliotheca Sacra, volumen 12, páinas
153-155: “El intercambio de regalos entre amigos es característico tanto de la
Navidad
La verdad es que la costumbre de intercambiar regalos con amigos y parientes durante la época navideña, ¡no tiene absolutamente nada que ver con el cristianismo! Aunque nos parezca extrañlo, ¡ello no celebra el nacimiento de Jesucristo ni lo honra a El! Supongamos que alguna persona que usted estima está celebrando su cumpleaños. ¿La honraría usted comprando cantidades de regalos para todos los demás parientes y amigos, haciendo caso omiso de la persona a quien desea honrar? ¿No le parece absurdo desde este punto de vista?
Sin embargo, esto es precisamente lo que hace la gente en todo el mundo. Observan un día en que Cristo no nació, gastando todo el dinero que logran reunir para obsequjar regalos a sus parientes y amigos. Pero años de experiencia nos enseñan que los cristianos profesos suelen olvidarse de dar algo a Cristo y a su Obra en el mes de diciembre. Este suele ser el mes en que más sufre la Obra de Dios. Aparentemente la gente está tan ocupada intercambiando aguinaldos que no se acuerdan de Cristo ni de su Obra. Después, durante enero y aun febrero, tratan de recuperar todo lo que gastaron en Navidad, de modo que muchos, en lo que se refiere al apoyo que dan a Cristo y su Obra, no vuelven a la normalidad hasta marzo.
Veamos lo que dice la Biblia en Mateo 2:1,
11 respecto a los regalos que llevaron los magos cuando nació Jesucristo.
“Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días
¿Por qué le llevaron regalos a Cristo?
Notemos que los magos preguntaron por el niño Jesús, nacido rey de los judíos. Pero, ¿por qué le llevaron regalos? ¿Por ser su cumpleaños? ¡De ninguna manera!, ya que ellos llegaron varios días o semanas después de su nacimiento. Entonces, ¿lo hicieron para darnos ejemplo? ¡No! Tomemos nota. Ellos no intercambiaron regalos; más bien “le ofrecieron presentes” a El, a Cristo. ¡No intercambiaron regalos con sus amigos y familiares, ni entre ellos mismos!
¿Por qué? El mencionado comentario bíblico
de Adán Clarke, volumen 5, página 46, dice: “Versículo 11. (Le ofrecieron presentes.) En el Oriente no se acostumbra entrar a
la presencia de reyes y grandes personajes con las
manos vacías. Esta costumbre es señalada con frecuencia en el Antiguo
Testamento y aúm persiste en el Oriente y en algunas islas . . .
¡Ahí está! ¡Los magos no estaban
instituyendo una nueva costumbre cristiana de
intercambiar regalos para bonrar el nacimiento de Jesucristo! Actuaron de
acuerdo con una antigua costumbre oriental que
consistía en llevar regalos al presentarse ante un rey. Ellos llegaron en persona ante la presencia del Rey de los judios. Por tanto, llevaron obsequjos de la
manera que los llevó la reina de Sabá a Salomón y así
La costumbre de dar aguinaldos no tiene nada que ver con este acontecimiento; más bien es la continuación de una antigua costumbre pagana. En vez de honrar a Cristo, lo que hace es atrasar su Obra cada año en la época navideña.
¿Honra a Cristo realmente?
Ahora veamos un argumento utilizado con frecuencia para justificar la observancia de la Navidad.
Hay quienes insisten en que a pesar de tener sus raíces en una costumbre pagana, ahora no se observa la Navidad para honrar a un falso dios, el dios Sol, sino para honrar a Jesucristo.
¿Qué nos dice La Palabra de Dios al respecto? “No caigas en la trampa detrás de ellos [los pueblos paganos]; no consultes a sus dioses ni averigues cómo les daban culto dichos pueblos, para hacer tú lo mismo. Tú no harás lo mismo con el Señor tu Dios, porgue ellos hacían a sus dioses cosas que detesta y abomina el Señor” (Deuteronomio 12:30-31, Nuava Biblia Espafiola).
Asimismo, el profeta Jeremías nos advierte con respecto a las costumbres tradicionales de la sociedad qua nos rodea: “Dice el Señor: No imitéis la conducta de los paganos... Los ritos de esos pueblos son falsos” (Jeremias 10:2-3, Nueva Biblia Española).
Dios nos dice claramente en su manual de
instrucciones para nosotros — la Biblia — que no aceptará esta clase de culto
aunque sea con la intención de honrarlo a El. Nos dice que eso es abominable y por tanto no lo honra a El
sino a los falsos dioses paganos. Dios no quiere que lo honremos “
De nuevo, Jesús dijo: “Pues en vano me honran, enseñando coma doctrinas, mandamientos de hombres” (Mateo 15:9). La observancia de la Navidad es un mandamiento de hombres y esto lo ha prohibido Dios. Jesucristo dijo además: “Asi babéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición” (Mateo 15:6).
Esto es precisamente lo que hacen hoy millones de personas. Desechan el mandamiento de Dios. Su mandamiento con respecto a la celebración de costumbres paganas para honrar o adorar a Dios es clarísimo: “Tú no harás lo mismo con el Señor, tu Dios”. Sin embargo, la mayoría de las personas toman a la ligera este mandamiento y lo invalidan siguiendo la tradición de los hombres al observar la Navidad.
¡No nos equivoquemos! Dios nos permite desobedecer. Nos permite seguir las costumbres de los hombres. Nos permite pecar. Pero también nos advierte que habrá un día de juicio en el que ¡segaremos lo que hayamos sembrado! Jesucristo fue la Palabra viviente y personal de Dios, y la Biblia es la Palabra de Dios escrita. ¡Por esas palabras seremos juzgados para toda la eternidad! No debemos hacer caso omiso de ellas ni tomarlas a la ligera.
Estamos en Babilonia sin saberlo
La Navidad se ha convertido en una fiesta comercial, sostenida en parte por las
compañías y campañas publicitarias más grandes. En muchos lugares vemos a un “Papá Noel” disfrazado. Los anuncios publicitarios nos
mantienen engañados sabre el “espíritu navideño”. Los diarios que publican
estos anuncios también publican editoriales que exaltan y elogian la festividad
pagana y su “espiritu”. La gente, crédula, está tan convencida que muchos se
ofenden al conocer la verdad. Pero el “espíritu de Navidad” es revivido cada
año, no para honrar a Cristo ¡sino para vender mercancías!
Nos hemos denominado naciones cristianas, pero sin saberlo estamos realmente en Babilonia,
tal
Este año en lugar de intercambiar regalos, ¿por qué no invertir ese dinero en la Obra de Dios?
Este folleto no es para la venta.
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